¿Conoces los pasos para obtener un magnífico jardín? La primavera es un buen momento para comenzar a cultivar y cavar, aunque estas son tareas que podemos planificar antes de que se derrita la nieve.

Los jardineros pasan la mayor parte del verano regando, desyerbando y viendo crecer las plantas jóvenes. El otoño o principios de la primavera es un buen momento para plantar árboles, arbustos, bulbos y algunas plantas perennes.

Pasos para obtener un magnífico jardín

Pasos para obtener un magnífico jardín

En este artículo de Arpasa, les mostraremos algunos pasos para obtener un magnífico jardín. Según el tipo de jardín que deseemos, podremos lograr el jardín que siempre hemos deseado.

1. Construir la idea de nuestro jardín

¿Va a ser un huerto? ¿Un jardín de hierbas? ¿Un jardín de flores? Si elegimos cultivar flores, ¿queremos plantas anuales, que debemos replantar cada año pero que dan color la mayor parte del verano? ¿O preferimos las plantas perennes, que tienen un tiempo de floración más corto, pero vuelven año tras año? Podemos mezclar cualquiera de las anteriores ideas, después de todo, es nuestro jardín. Solo un pequeño consejo: comencemos con algo pequeño.

Pasos para obtener un magnífico jardín Pasos para obtener un magnífico jardín

2. Elección del lugar

Casi todas las verduras y la mayoría de las flores necesitan alrededor de seis horas de pleno sol cada día. Podemos pasar un día en el lugar que elijamos y observar cómo el sol se mueve sobre el sitio que hemos escogido para nuestro jardín. Podría recibir más sol de lo que creemos.

Sin embargo, no debemos desesperarnos si nuestro terreno es mayormente sombreado ya que muchas plantas toleran la sombra. Revisemos las especificaciones de las plantas o también podemos asesorarnos con el personal de nuestro centro de jardinería local para averiguar cuánto sol requiere una planta.

Nuestro terreno debe estar lo suficientemente cerca de un grifo de agua para que no tengamos que llevar la manguera demasiado lejos.

3. Limpiar el terreno

Debemos deshacernos de cualquier maleza o hierba que cubra el área que planeamos plantar. También debemos eliminar las plantas y arbustos viejos, muertos o vivos que ya no deseemos que formen parte de nuestro jardín.

Si estamos comenzando un nuevo jardín, debemos retirar el césped y trabajar la tierra. Esto significa agregar fertilizante y el tipo de abono que funcione muy bien para la mayoría de las plantas y árboles que vamos a sembrar.

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4. Mejorar las condiciones del suelo

De cualquier forma, nuestro suelo necesita de cierto impulso. La solución es muy sencilla, le añadimos materia orgánica. Agregamos una capa de compost de 5 a 8 centímetros de hojas podridas, recortes de césped seco o abono.

5. Excavar o no el terreno

La excavación afloja la tierra para que las raíces puedan airearse y penetrar más fácilmente. Sin embargo, excavar cuando el suelo está demasiado húmedo o demasiado seco puede arruinar su estructura.

Podremos excavar solo cuando la tierra esté lo suficientemente húmeda como para formar una bola suelta en nuestro puño, pero lo suficientemente seca como para desmoronarse cuando la dejemos caer.

Podemos usar una pala o una pala tenedor para voltear suavemente unos 20 a 30 centímetros de la capa superior de tierra, mezclando la materia orgánica que hemos señalado en el paso 4.

En huertos y macizos de flores anuales, podemos revolver la tierra solo una vez al año en la primavera antes de plantar.

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6. Elección de las plantas

Algunas personas estudian minuciosamente los catálogos durante meses, otras, van al centro de jardinería de su agrado y compran las plantas que más les cautiva. Cualquiera de los métodos funciona si elegimos plantas adaptadas a nuestro clima, suelo y la cantidad de luz solar que penetra en nuestro jardín. Incluso podemos navegar por Internet para comprar plantas.

A continuación, algunas plantas fáciles de cultivar para principiantes:

  • Anuales. Angelonia, Begonia, Celosía, Crisantemo, Cosmos, Dalia, Geranio, Caléndulas, Geranios, Girasoles y Zinnias.
  • Plantas perennes. Verónica, Salvia Farinácea, Áster, Astilbe, Echinacea, Milenrama, Peonía, Coreopsis, Orejas de cordero, Coneflowers púrpuras, Phlox, Pensamientos y Azucenas.
  • Hortalizas y verduras. Lechuga, Pimientos, Tomates, Coles y Pepinos.

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7. Plantar en el suelo

Algunas plantas, como los pensamientos y la col rizada, toleran el frío, por lo que podemos plantarlas en otoño o al final del invierno. Los tomates y la mayoría de las flores anuales, por otro lado, son sensibles al frío, así que no debemos plantarlos hasta que el peligro de las heladas haya pasado en nuestra zona. La mitad de la primavera y el otoño son buenos momentos para plantar flores perennes.

Algunas plantas, como la lechuga y los girasoles, son fáciles de cultivar a partir de semillas. Podemos sembrarlos directamente en el jardín. Debemos asegurarnos de leer las instrucciones del paquete de semillas para obtener información sobre cuándo plantarlas, a qué profundidad y a qué distancia sembrar las semillas.

Si somos principiantes, podemos adelantar la temporada de crecimiento sembrando las semillas en macetas en el interior de nuestra vivienda antes de la última fecha de heladas. Podemos adquirir jardineras o repisas diseñadas especialmente para las plántulas sembradas, así como mezclas de tierra para semillas que podemos encontrar en centros de jardinería.

Es recomendable seguir las instrucciones del paquete de semillas y colocar las jardineras en un antepecho soleado de una ventana o bajo luces artificiales si no tenemos espacio en la ventana. Debemos asegurarnos de mantener las semillas y las plántulas húmedas, pero no empapadas ya que podrían pudrirse.

Un método más sencillo es comprar plantas jóvenes, ya establecidas o trasplantadas. Cuando sea propicio, podemos cavar un hoyo en nuestro jardín para trasplantarlas con cuidado conservando sus raíces y la tierra de la maceta.

8. Riego frecuente

Las plántulas nunca deben secarse, por lo tanto, debemos regarlas a diario mientras son pequeñas. A medida que las plantas crecen, podemos disminuir la frecuencia del riego. Los nuevos trasplantes también necesitan riego frecuente, cada dos días más o menos, hasta que sus raíces se establezcan. Después de eso, la frecuencia con la que necesitamos regar depende de qué tan húmedo es nuestro clima y con qué frecuencia llueve.

9. Colocación de mantillo

Para ayudar a mantener la humedad y evitar las malezas, cubrimos la tierra con unos 5 centímetros de mantillo. Existe una gran variedad de mantillos disponibles, desde agujas de pino hasta cáscaras de cacao y virutas de corteza. Para un huerto o una cama de plantas anuales, elegiremos un mantillo que se descomponga en unos pocos meses. Para las plantas perennes, podemos usar un mantillo de mayor duración, como astillas de corteza.

10. Mantener el jardín

Nuestro jardín ya está en camino. Lo seguimos regando cuando sea necesario y le quitamos las malas hierbas antes de que crezcan. Adicionalmente, empleamos un fertilizante seco alrededor de la mitad de la temporada. Si usamos un fertilizante líquido, lo emplearemos de manera mensual.

Esperamos que este artículo sobre los pasos para obtener un magnífico jardín, les haya resultado de utilidad. Si desea obtener más información sobre aplicaciones para césped natural o artificial en áreas deportivas o paisajismo, contáctenos hoy mismo. Será un placer responder a cualquier pregunta que pueda tener y ayudarlo a encontrar la mejor solución.