Antes de utilizar fertilizantes en nuestro césped natural debemos conocer la variedad de planta que podemos tener en el jardín, la cantidad y la forma en la que se debe aplicar el fertilizante.

Cualquier fertilizante siempre debe contener tres elementos: potasio, fósforo y nitrógeno. También debe contar con otros elementos para favorecer el crecimiento como el cobre, boro y manganeso.

Hoy en Arpasa te estaremos aconsejando cómo utilizar un fertilizante complejo formado por ciertos micro elementos para que tu césped natural cuente con un desarrollo perfecto.

Todo lo que debes saber sobre fertilizantes para césped natural

Los fertilizantes, así como ocurre con diferentes tareas que realizamos en nuestro césped natural, se debe llevar de la forma más adecuada para no dañar las plantas. Por ello, debemos conocer la dosis correcta que se debe colocar, siguiendo ciertas normas y consejos para manipular de forma eficiente los fertilizantes.

Te estaremos indicando por qué es necesario fertilizar el césped y que tipo de fertilizantes se deben utilizar. Además, nombraremos algunas de las dudas que normalmente suelen surgir antes de realizar esta tarea.

Las plantas son elementos que necesitan de nutrientes para su correcto desarrollo, así como ocurre con los animales. En ciertas ocasiones, algunos suelos suelen favorecerse en la absorción de ciertos nutrientes, pero a medida que el tiempo va pasando las siegas y los riegos disminuyen ese aporte que necesita el césped que proviene de la fertilización.

Todo lo que debes saber sobre fertilizantes para césped natural

Las razones por la cual las plantas necesitan de ciertos nutrientes como el fertilizante es por lo siguiente:

  • Para realizar siegas continuas.
  • Existen suelos que son escasos de nutrientes o que son muy arenosos.
  • Ayuda a controlar y disminuir de forma sensible la aparición de malas hierbas.
  • Ayuda al crecimiento de hojas y raíces de forma activa.
  • Evita los ataques de ciertos hongos fortaleciendo la planta. En caso de que haya sufrido ciertos daños por otros ataques los fertilizantes ayudan a su recuperación.

La cantidad que tendremos que aplicarle al césped siempre dependerá del tipo de suelo, la superficie que tengamos y la variedad del césped.

El abono que se utiliza debe contener cantidades ideales tanto de potasio, fósforo, nitrógeno, azufre, magnesio, manganeso, hierro y zinc. Todas ellas son sumamente necesarias para el fortalecimiento y crecimiento de un césped sano. Normalmente suele presentarse de forma granulada ayudando a una mejor distribución de los nutrientes de forma equilibrada y eficiente.

Dependiendo de la forma del césped y el estado de su presentación, los fertilizantes pueden ser tanto granulados como líquidos:

Granulado. Este se utiliza por todo el terreno y es ideal ser regado para su completa disolución y absorción de la tierra. Es muy fácil de llevar a cabo un control cuando lo aplicamos. Los fertilizantes granulados pueden ser tanto de liberación rápida como lenta.

Rápida. Sólo en cuatro semanas estaría liberando todos sus nutrientes.

Lenta. Libera de forma gradual todos los nutrientes que son necesarios para la planta. Esto puede durar al menos entre 8 a 12 semanas. Este tipo de fertilizantes estarán nutriendo de forma correcta durante una gran cantidad de tiempo haciendo que se reduzca la pérdida de nutrientes.

Líquidos. Estos penetran de forma rápida de la tierra. Normalmente se utilizan con agua.

Dependiendo de la cantidad, el tipo de césped natural y la temperatura ambiente, la cantidad de absorción puede variar.

Existen también fertilizantes con acción herbicida. Esto suele utilizarse cuando existen malas hierbas para así evitar su proliferación.

Todos los elementos químicos que componen los fertilizantes cuentan con ciertos beneficios y características ayudando al césped natural. A continuación, veamos con detalle cuales son los elementos utilizados por medio de una pequeña descripción:

Nitrógeno: este ayuda al crecimiento de las hojas y le proporciona al césped una tonalidad verde. Este elemento es imprescindible y debe tener presencia en los fertilizantes.

Fósforo, potasio y calcio: benefician el correcto desarrollo de las raíces. Por ejemplo, en el caso del potasio, le aporta una mayor resistencia ante temperaturas muy bajas, sequías o enfermedades.

Magnesio: ayuda a la formación de azúcares siendo bastante esencial para el tejido vegetal.

Azufre: es un agente que potencia la acción fungicida y la coloración.

Zinc: ayuda al crecimiento y el desarrollo sano del césped natural. También es bastante esencial para la síntesis de proteínas y el metabolismo del nitrógeno.

Hierro: este es bastante fundamental para el crecimiento del césped natural. Una ausencia de este elemento hará que aparezcan zonas con color amarillento.

Manganeso: ayuda al proceso de fotosíntesis cuando se une con el Hierro.

Los fertilizantes deben ser aplicados tanto en otoño como en primavera. Siempre que no haga frío o calor extremo. La cantidad que se aplicar es bastante importante ya que una dosis baja no aportará grandes nutrientes a las plantas y una cantidad excesiva puede causar daños en el césped natural.

No debe acumularse grandes concentraciones de fertilizante en zonas determinada del césped, ya que podríamos proporcionarle quemaduras. Se puede llevar a cabo manualmente o mediante ciertas herramientas que faciliten la tarea. Luego de colocar el fertilizante, se debe regar el césped para que el abono pueda disolverse y penetrar completamente en la tierra.

Un consejo es realizar el abono luego de la siega y nunca con el césped húmedo. Esto ocasionaría que el fertilizante se quede pegado a las hojas y le provoque quemaduras.

Se debe tener mucho cuidado cuando se fertiliza el césped. Nunca debe existir viento y se debe contar con prendas de protección para evitar el contacto directo con la piel. Luego de terminar el proceso, se debe limpiar todos los utensilios forma correcta.

Uno de los errores más comunes que se suelen cometer a la hora de abonar el césped natural es por los bajos proporciones de los nutrientes que son necesarios para su crecimiento. También, no abonar de forma uniforme o regar de manera insuficiente el césped luego de abonarlo.

Siguiendo estos consejos podrás obtener un césped natural mucho más sano y que durará por más tiempo.